¿Por qué ocupa México el primer lugar en obesidad infantil?
Por Érika Rodríguez
Zacatecas,
Zacatecas. 4 de julio de 2017 (Agencia Informativa Conacyt).- Con
base en revisiones estadísticas y una investigación documental que
comprende un periodo de quince años —de 2000 a 2015—, la doctora
en estudios del desarrollo Cristina Almeida Perales determinó los
factores sociales involucrados en el sobrepeso y obesidad escolar de
la zona metropolitana Zacatecas-Guadalupe. Esta tesis de
investigación doctoral la hizo acreedora a una mención honorífica
por parte de la Universidad Autónoma de Zacatecas (UAZ).
El
doctor Rodolfo García Zamora, miembro nivel II del Sistema Nacional
de Investigadores (SNI)
y asesor de este proyecto en la Unidad Académica de Estudios del
Desarrollo (UAED-UAZ),
indicó en entrevista con la Agencia Informativa Conacyt que el
estudio referido rápidamente llamó la atención de la sociedad
zacatecana debido a la posición que ocupa México a nivel
internacional en el tema de desnutrición aparejada con la obesidad
infantil.
“A nivel mundial, en este momento México ocupa el poco honroso primer lugar en obesidad infantil. La relevancia de esta investigación consistió en abordar un panorama mundial sobre obesidad y sobrepeso, analizar qué es lo que está pasando con México y conocer cómo se expresa este hecho en esta zona metropolitana, con un trabajo de campo basado en cientos de entrevistas a niños, maestros y padres de familia de las escuelas primarias”.
Ante
esto, informó que la doctora Cristina Almeida determinó en su
investigación cuáles son causas estructurales, económicas,
sociales, familiares y personales que podían explicar este fenómeno
pernicioso de desnutrición y obesidad en la población infantil en
escuelas primarias públicas y privadas de los municipios de
Zacatecas y Guadalupe.
“Es
importante señalar que para este proyecto, la doctora Cristina contó
con el respaldo de una experta en cuestiones alimentarias, la doctora
Michelle Chauvet Sánchez, de la Universidad Autónoma Metropolitana
(UAM) Azcapotzalco, así como del doctor Felipe Torres Torres, del
Instituto de Investigaciones Económicas de la UNAM, que
fortalecieron al doctor Roberto Soto y su servidor como los asesores
de esta investigación”.
Manifestó
que los principales hallazgos y aportes de este proyecto de
investigación ya han sido presentados y publicados en dos eventos
internacionales de alimentación y nutrición. El primero en el XV
Congreso Internacional del Observatorio de la Alimentación y
Fundación Alicia, en Barcelona, España, en junio de 2015; el
segundo, en el IV Foro Bienal Iberoamericano de Estudios del
Desarrollo, del 16 al 18 de mayo en Quilmes, Argentina.
Más allá de las causas inmediatas
La
doctora Cristina Almeida Perales, quien se desempeña desde hace 12
años como docente investigadora en estadística dentro del área de
Ciencias de la Salud de la UAZ, expuso que entre la experiencia con
sus alumnos era muy repetitivo el tema de sobrepeso y obesidad, cuyos
resultados eran enfocados en las causas inmediatas, hecho congruente
con el perfil, estilos de vida, dieta y actividades físicas del
paciente.
“En
estos trabajos se obtenían las causas inmediatas que intervienen en
el sobrepeso y obesidad de las personas; pero luego empezó nuestra
inquietud y quisimos darle un nuevo enfoque para conocer más allá
de ellas, ¿a qué se debe que tengamos malos hábitos como
población?, ¿qué es lo que sucede cuando muchos tenemos la
voluntad de cambiar nuestra forma de alimentación pero persisten
estas prácticas?, ¿qué pasó para que ese tipo de alimentos
terminara en nuestros platos y nosotros con esas elecciones?”.
Exteriorizó
que desde 2006 este tema en México se convirtió en un foco rojo
cuando la Encuesta Nacional de Salud y Nutrición indicó que 34 por
ciento de los niños en edad escolar tenía sobrepeso y obesidad.
Esto hizo que activistas y organizaciones sociales se preguntaran qué
había hecho el estado para evitar o prevenir el problema y al
revisar las políticas públicas no encontraron nada en absoluto.
“Con
esto surgió el interés de revisar esa parte y saber en qué medida
el estado y la industria alimentaria habían sido cómplices de esta
situación y en el que terminan con un discurso que indica que cada
uno de nosotros es responsable de lo que está comiendo y de la
condición en la que se encuentra. Entonces nos dicen que es cuestión
de elección individual, algo que es válido cuando una persona se
desarrolla en un entorno favorable y con información para tomar
mejores decisiones. Esto no sucede con la mayor parte de los
mexicanos, ya que más de la mitad vive en condiciones de pobreza”.
Almeida
Perales aclaró que otros de sus alumnos han documentado que tener un
buen ingreso económico no asegurará la buena calidad de
alimentación de las personas, pues también tiene que ver su
conocimiento en nutrición y en qué medida desean mantener su nivel
de salud.
Hábitos de nutrición y su relación con la distribución de los alimentos
Al
revisar la literatura, la doctora Cristina Almeida encontró que la
mal nutrición y la manera en que se reproducen y distribuyen los
alimentos a nivel mundial tiene una repercusión directa en México,
situación que se desencadenó a partir de la crisis de 1982, cuando
México comenzó a adoptar las políticas del modelo neoliberal
capitalista y después con la entrada en vigor del Tratado de Libre
Comercio con América del Norte (TLCAN).
“Al ser la agricultura una actividad estratégica y México un fuerte productor de granos básicos como maíz y frijol, con estas políticas de ajuste estructural, se impuso una disminución importante de esta producción para impulsar el cultivo de otros alimentos no tradicionales para su importación, pues había que seguir el paradigma de las ventajas comparativas, que sostiene la preferencia de comprar mercancías que resulten más económicas para el país, que el costo de producirlas localmente”.
Esto
ocasionó que en los últimos 10 años, el coeficiente de dependencia
alimentaria —valor de importación de alimentos sobre el valor de
producción alimentaria total— se ha mantenido en una proporción
media de 45 por ciento.
“Asimismo,
mediante análisis en censos económicos del Instituto Nacional de
Estadística y Geografía (Inegi) y el Directorio Estadístico
Nacional de Unidades Económicas (DENUE), comprobamos que la cantidad
de supermercados y tiendas de conveniencia se mantiene a la alza. A
pesar de que en México ya teníamos marcas muy bien posicionadas,
empezaron a situarse en nuestro país competidores extranjeros que
ahora prácticamente lideran las ventas del mercado en detalle en
alimentos”.
¿Cuánta proteína y grasa consumen los mexicanos al día?
Mediante
un estudio documental con estadísticas de la Organización de las
Naciones Unidas para la Agricultura y la Alimentación (FAO, por sus
siglas en inglés), la doctora Cristina Almeida hizo un esquema que
refleja los niveles de proteínas y grasas del consumo del mexicano
entre 1999 y 2011.
“En
el consumo de proteínas hubo una disminución de 98 a 85 gramos al
día; sin embargo, en donde visualicé cambios notables fue en el
consumo de grasas, pues de 75 gramos al día que se detectó en 1990,
en 2011 aumentó a 93 gramos. Esto pareciera que se mantiene en un
comportamiento lineal positivo, que nos indica que a la próxima
consulta podría tener un número más alto”.
Sobrepeso y obesidad en Zacatecas
Según
la Encuesta Nacional de Salud y Nutrición (Ensanut), la población
del estado de Zacatecas, en 1999, tenía una tasa de sobrepeso y
obesidad de 17 por ciento. En 2006, hubo un incremento de más de
diez puntos porcentuales, a 29 por ciento. En 2008, fue de 30 y en
2012, de 27 por ciento. Las cifras correspondientes a 2016 ya fueron
publicadas por Ensanut a nivel nacional, pero faltan los resultados
por estado para conocer la situación de Zacatecas.
“Aunado a esto, ¿qué sucede con el abasto y la distribución de los alimentos en el estado de Zacatecas? En la zona metropolitana hay un crecimiento notable y una saturación de supermercados. En 2010, de 101 tiendas de conveniencia, teníamos 56 en la zona metropolitana. En 2015, de 167 tiendas, 88 se localizaban en esta zona también. El número sigue creciendo y cerca de la mitad sigue distribuida en estas dos ciudades. Esto tiene gran influencia en la alimentación y es ahí cuando notamos que nuestras elecciones de consumo no son tan individuales, pues estamos sometidos una disponibilidad alimentaria perniciosa que se transforma en ambientes obesogénicos convertidos en oportunidades de influencia de una sobrealimentación”, explicó la doctora Cristina Almeida. |
Hábitos
de alimentación en edad escolar
A
pesar de que las estadísticas de la Secretaría de Agricultura,
Ganadería, Desarrollo Rural, Pesca y Alimentación (Sagarpa) han
indicado que Zacatecas es de las entidades del país con una mayor
producción de frijol, la doctora Cristina Almeida expuso que al
revisar la frecuencia de consumo de alimentos en los alumnos de
escuelas primarias de Zacatecas y Guadalupe, encontró que uno de
cada diez niños no consume frijol o alguna leguminosa de esta
familia.
“Además,
en función del plato del buen comer, más de 50 por ciento de los
niños consume leguminosas por debajo de lo recomendado, al igual que
en el caso de frutas y verduras, ¿qué es lo que están consumiendo
en su lugar? Azúcares y cereales, principalmente. Luego tenemos los
productos de origen animal y lácteos. Esta es una dieta
occidentalizada y estadounidense que está adoptando México en sus
patrones de consumo”.
La
doctora Cristina Almeida expuso que las encuestas no indicaron
distinción de sobrepeso y obesidad entre las escuelas públicas y
privadas. La diferencia es que en las escuelas privadas tienen un
mayor consumo de productos de origen animal y lácteos, mientras que
en las escuelas públicas comen mayormente cereales.
Este
dato coincidió con un estudio desarrollado
en 2015 por el cuerpo académico de Modelación Matemática
Multidisciplinaria de la UAZ, liderado por la doctora Leticia Adriana
Ramírez Hernández, en donde el equipo detectó que son los mismos
factores que se reportan en el modelo general de sobrepeso y obesidad
entre escuelas públicas y privadas del estado de Zacatecas; el
contraste fue en los casos de desnutrición, con dos por ciento más
de presencia en las instituciones públicas.
“Esto
me hizo llegar a la conclusión de que no se está atacando el
problema desde la raíz, sino superficialmente. Con esto también
observamos que el sobrepeso y obesidad están relacionados con el
régimen alimentario vigente, que beneficia a las grandes empresas
trasnacionales que transcriben la alimentación de la población y
también someten a la agricultura. Es lo que sucede en México y
lamentablemente no son buenas noticias”, expuso Cristina Almeida.
Intervenciones educativas alimentarias
La
doctora Cristina Almeida hoy en día ha contribuido y planea
continuar en la solución de este problema con una serie de
intervenciones educativas alimentarias, con la intención de educar
en temas de nutrición, hábitos y elecciones de alimentación a la
población escolar y padres de familia.
“En
un principio, los padres de familia se sorprendieron pero luego se
interesaron. Entonces, como resultado hemos tenido respuestas, mucha
claridad en el tema, y en lo personal y profesional me sirvió como
punto de partida para desarrollar otras investigaciones al respecto.
Ojalá podamos implementar estas propuestas en más escuelas del
estado y sean consideradas a nivel nacional”, concluyó.Comunicate a traves de watsap : +5218112289293 ,facebook , twitter o linkedin y haz una cita o a traves de la web consigue tu plan nutricional...
No hay comentarios:
Publicar un comentario
Muchas gracias por dejar sus comentarios.